Menarquia: características de la primera regla o menstruación en las niñas

Equipo SaludActual

La menarquia es la primera regla. Con ella se inicia la ovulación, por lo que la niña o adolescente está biológicamente preparada para ser madre, aunque esto no significa que ella esté psicológicamente lista para este importante paso en la vida.

Menarquia quizás no sea una palabra muy utilizada. Aún recuerdo a mi abuelita diciendo que yo ya me había transformado en señorita cuando tuve mi primera menstruación. Y eso es: la menarquia es la primera menstruación.

Sin embargo, una serie de dudas se me vinieron a la cabeza cuando el tema se me presentó y le pregunté directamente a Constanza Ramírez, mi matrona:

¿Qué es la menarquia? ¿Cuáles son sus características y su explicación médico-científica?

La menarquia consiste, por definición, en el primer periodo menstrual, dando inicio al periodo reproductivo en sí. Se produce cuando el organismo está fisiológicamente preparado para poder concebir. Se puede considerar también como el paso de niña a mujer, claro que lo digo refiriéndome a lo que le acontece al cuerpo, ya que socialmente no nos referimos a una niña de 9-10 años como una mujer.

A muy grandes rasgos podemos decir que este primer periodo menstrual se debe al aumento progresivo de las hormonas llamadas gonadotrofinas coriónicas, secretadas en la hipófisis. Esto se debe a que durante la pubertad se desarrolla una retroalimentación positiva de estrógenos, estimulando su liberación.

Las hormonas gonadotrofinas o gonadotropina son dos: Luteinizante (LH) y Folículo Estimulante (FSH), las cuales actúan a nivel del ovario.

La FSH está encargada de estimular el crecimiento de los folículos, de los cuales el más apto logra sobrevivir, posteriormente se desencadena un peak de LH, provocando el desprendimiento del ovocito. Esta hormona provoca la transformación de los restos del folículo en el cuerpo lúteo, encargado de albergar al embrión si ocurre fecundación. En el caso de que esta no ocurra, los niveles hormonales descienden considerablemente, impidiendo la sobrevivencia de este cuerpo lúteo, degenerando, desprendiéndose, produciendo el flujo menstrual.

¿Viene acompañada de síntomas?

Viene acompañada de los síntomas típicos premenstruales: dolor de cabeza, turgencia en los pechos, dolor bajo el vientre, irritabilidad, etc. Síntomas que, cabe destacar, dependen del organismo y percepción de cada mujer.

¿A qué edad debería llegar?, ¿cuándo sería muy temprana o tardía?

La edad de la menarquia es relativa. Es decir, depende de cada organismo: del tipo de alimentación o dieta de la joven, factores hormonales, del ejercicio, incluso la mentalidad existente referente al tema.

En promedio, podríamos concluir que la edad de la menarquia es aproximadamente a los 12 años. Sin embargo, los extremos dentro del rango normal es entre los 8 a 16 años.

¿Qué influye en la menarquia tardía?

Una menarquia tardía se puede dar por una dieta baja en grasas, como en jóvenes con algún trastorno alimenticio: anorexia o bulimia. O cuando existe un gasto importante de energía que mantiene las reservas de grasas demasiado bajas, como lo es en situaciones en donde las adolescentes son sometidas a entrenamientos intensivos -atletas de alto rendimiento, por ejemplo-, sobre todo desde edades tempranas de su vida. Los depósitos de grasas disminuidos influyen principalmente debido a que son los promotores en la síntesis de hormonas.

Otro factor que puede influir es el estrés, trastornos psicológicos como el miedo, por ejemplo, que afectan la síntesis a nivel neuronal, hipófisis-hipotálamo.

¿Qué influye en la menarquia temprana?

Hay estudios que indican que el desarrollo socio-cultural de un país influye en el aumento de la menarquia precoz, lo que se puede deber al acceso facilitado de alimentos ricos en grasas o animales criados en conjunto con administración de hormonas. Las mujeres obesas presentan una mayor tasa de menarquia precoz.

¿Qué hacer en caso de que sea temprana o tardía?

No hay mucho que hacer en el caso de que sea temprana. A pesar de que esta situación se vea vinculada con un aumento en el riesgo de poseer cáncer de mama, estatura reducida o infarto al miocardio.

No obstante, lo que se podría hacer es utilizar medidas para evitar una menarquia temprana, mediante alimentación equilibrada por ejemplo. Pero no podemos "cortar" los ciclos menstruales, si ya se han desencadenado.

En el caso de la menarquia tardía, afecta principalmente en la imposibilidad de fecundación, lo cual, si la mujer no desea concebir, debería esperar a la llegada de su menarquia fisiológica natural.

Se pueden tratar mediante la detección del problema que impide la menarquia. Por ejemplo, mejorando la calidad de la dieta.

En casos en donde el trasfondo del trastorno se deba a otras condiciones, se pueden aplicar terapias hormonales.

¿Qué se le puede recomendar para los padres?, ¿cómo y cuándo tratar el tema?, ¿se debe tener algún cuidado especial?

Personalmente recomendaría explicar la situación a sus hijas, que es un acontecimiento totalmente normal, que a todas las niñas les sucede, que no deben preocuparse, educando aproximadamente desde los 8 años. Mi cuidado especial sería tener confianza con su hija, que le cuente todas sus dudas, para así mejorar la seguridad de ella, dando por entendido que la menarquia es un proceso que forma parte de su vida y de su cuerpo.

¿Qué consejo le daría a los papás de las niñas que experimentan la menarquia?

Si se presenta la menarquia, eduque no sólo sobre lo que consiste este proceso, sino también hable sobre sexualidad. Ahora su cuerpo está preparado para tener hijos. Informe sobre los distintos métodos anticonceptivos, lleve a su hija a un profesional que la instruya respecto al tema y comience algún tipo de método anticonceptivo.

Luego de entrevistar a mi matrona Claudia Ramírez, llegué a la conclusión de que es muy importante una conversación previa, abierta y cariñosa de parte de los padres, puesto que la niña o adolescente puede asustarse o informarse por otros lados -amigos, pares, Internet- obteniendo información errónea de lo que le ocurre a su cuerpo. Además, no se debe olvidar que debe existir una orientación sexual, ya que con la menarquía la mujer ya puede ser madre.

Mireya Guzmán.

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